Hace exactamente un mes que ocurrió la tragedia en el barrio cervantes de Manizales, donde perdieron las vida 48 personas, 14 viviendas destruidas, varias familias damnificadas y un sinnúmero de oportunistas con deseos de meterle la mano a las donaciones de la gente de buen corazón.
Soy duro con el encabezamiento del artículo, pero lo sustento basado en el afán desmesurado de muchas personas y entidades que se aprovechan de la necesidad de los dolientes para crearles falsas expectativas de soluciones inmediatas de vivienda, alimentación, vestuario, muebles y enseres; además de las campañas pos-tragedia, que son acaparadas por los inescrupulosos, quienes utilizan cualquier cantidad de estrategias para recoger millonarias sumas de dinero sin ningún control fiscal.
luego de esta corta introducción, paso a formular varios interrogantes: ¿ que ha pasado con la campaña,"Todos por Manizales" liderada por la cámara de comercio de Manizales?, ¿Que dineros han recogido y que manejo le están dando?, valga recordar, que la meta trazada es de dos mil millones de pesos. ¿ Una vez se cumpla la meta, que sistema se va implementar para entregar los dineros?.
Además se creó otra campaña, cuya gestora fue la Iglesia católica,en cabeza del Arzobispo de Manizales, quien sugirió que el dinero fuera depositado en una cuenta a nombre del Palacio Arzobispal, a esta campaña no le pusieron meta, la cual es muy difícil controlar. Agrego a lo anterior, otras actividades, como por ejemplo, la realizada en el hotel termales el otoño, denominada Manizales tiene alma, organizada por la fundación celar, consistente en una cena con un costo de cien mil pesos por persona, con una muy buena asistencia; a la fecha no han presentado ningún informe de lo recaudado.
Lo más triste y lamentable de todo esto es que los damnificados del Barrio Cervantes, aún no han recibido un solo peso de lo recaudado en todas estas campañas de "solidaridad". Falta la otra parte de la promesa hecha por la ministra de vivienda, quien se comprometíó con tres mil cien millones de pesos, para la construcción de las viviendas.
Así mismo, se hizo otro evento para recoger artículos nuevos, electrodomésticos y otros enseres para aquellas familias que lo perdieron todo, pero a los organizadores de esta otra actividad, se les olvidó, que estas familias no tienen donde guardar estos elementos, ya que no han podido solucionar el problema de vivienda.
Ojalá, que esta tragedia, no se convierta en una tragedia con pinta de negocio.
